Paradojas en Contrapunto Luis de Jesús La obra de Luis Miguel de Jesús que tenemos para nuestro juicio compendia el fluir intelectual propio de una era en que se abrieron metas afines para poder plantear proyectos futuristas, destinados a nuevas concepciones del mundo, el hombre y la vida. Nuestro artista ha buscado dentro de los marcos tradicionales, caminos centrífugos para sentar las bases de un discurso estético que permita entender los elementos cognitivos de un período en función de hallar bifurcaciones que tomen como base lo existente y a la vez establezcan un abanico de rutas investigativas a la estética. La ecuación a la cual el artista ha prestado atención especial es la fusión resultante de pensamiento y creación. De cierto modo, lleva a las artes a un plano pitagórico donde entran en vigor funciones teóricas encargadas de determinar las vías a tomar en consideración, a fin de lograr la combinación previamente mencionada. Reconoce a la vez sus limitaciones para que sirvan de guía a las ambigüedades creativas conformadoras del estilo. De ahí que ocasionalmente sienta el imperativo de ingresar en planos abstractos, con la intención de reconfigurar una imagen que responda al creador y su tiempo. Alcanzar momentáneamente la no objetividad origina un fenómeno de alineamiento donde el producto artístico, su productor y el contemplador comiencen a sopesar los cambios naturales que ocurren en el espíritu, la siquis y la vida natural que determinan los tiempos a los que responde el individuo. En cierto modo, está haciendo poesía cromática a través de la plástica, pues en ella se integran las fuerzas gravitativas interna, externa, y también los misterios y los contrasentidos que mantienen vivas las llamas vitales. En la obra ante mi consideración, hay una consciencia de consolidación. Se aspira a ver simultáneamente el alma de occidente. En las realizaciones, Luis propone de alguna manera descubrir el alfa y la omega de la existencia. Pues en su obra solo existe la chispa de excentricidad no planificada, debido a que su producción artística ha entrado “ex profeso” en intenciones enciclopédicas donde se busca lo universal en lo particular. De ahí afloran imágenes enigmáticas donde el yo es suprimido para dar paso a un saber incorruptible donde el ego da paso a la realidad desnuda. En ese aspecto hace coincidir una mayéutica a través de la cual nos recuerda planteamientos socráticos que dieron base a la consolidación de la civilización occidental. Es el diálogo el factor que mantiene coherente todos los aspectos de la vida y los factores esotéricos. Ello abre horizontes a convicciones y enigmas, de ahí que la figura de espaldas al teatro de lo absurdo, cuyos actores son representados con máscaras similares hechas de bolsas de papel estraza y cuyos espectadores permanecen ignorando el espectáculo televisado simbolizan la tragedia de la deshumanización, al punto que el único da cara es el perro de la familia. Significa así la enajenación de una generación que está en busca de un nuevo imaginario para poder dar sustancia a sus vidas. Están, por lo tanto, a la disposición para continuar un diálogo espontáneo que le permita sustanciar su estadía en el mundo. Parecen clamar por realidades aunque sean esquivas que den respuestas a sus planteamientos y funcionen como mutaciones emotivas cuyo valor cobra fuerza con las aproximaciones. De esta manera, de Jesús nos da una visión existencial y altamente crítica del momento en que vivimos. José Pérez Ruiz, Ph.DCrítico de arteAsociación Internacional de Críticos de Arte (AICA)San Juan, PR – 13 de febrero de 2016
Volando en Libertad
Volando en Libertad Alex Ríos Fernández Ríos Fernández recibió sus primeras lecciones del artesano Eduardo “Barón” González Rivera. Luego comenzó a destacarse en la talla de aves bajo la tutela de la maestra artesana Rosabel Suárez, quien se expresó así sobre el trabajo Ríos Fernández, “la calidad de su talla, los detalles, la composición y elegancia de cada una de sus piezas, hacen de éstas unas de colección”. Alex Ríos Fernández es el tallador de aves más galardonado de nuestro país. Antes de cumplir los 20 años se animó a presentar varias tallas en el Ward World Championship en Maryland, EE.UU., certamen internacional donde obtuvo segundo y tercer lugar, además de una mención de honor. Desde entonces, ha participado en innumerables concursos en EE.UU., Chile, España y Canadá. Actualmente, continúa bajo la mentoría de la talladora estadounidense Sue Kraft con quien comenzó a tomar clases en 2003. El artista Rios Fernández es reconocido internacionalmente por sus tallas en madera de aves de Puerto Rico, confeccionadas en madera de laurel, los ojos en cristal y las patas son moldeadas en bronce a las cuales les aplica pintura de óleo. “Alex es un claro ejemplo de superación personal y artística. Su responsabilidad, empeño y su disciplina con el desarrollo de sus destrezas artesanales hacen de su trabajo una vocación”, nos comenta la especialista en artesanías Zulma Santiago, quien conoce a Ríos Fernández desde niño. “Por su creatividad y habilidad en el manejo de la talla, la pintura y conceptualización de sus obras, Alex Ríos es un ejemplo de la transformación de gran maestro artesano a un gran artista. Su obra va más allá de una mera pieza tallada, es una pieza de arte, una escultura de minuciosos detalles inspirada en una realidad natural, de valor cultural y de significado espiritual”. Por su parte, la doctora Teresa Tió expresó, “en cada pieza el tallador se acerca con la meticulosidad de un orfebre o un miniaturista, cuidando el mínimo detalle. Esa es una parte esencial del oficio del tallador de aves”. Paralelamente a la exposición se ofrecerán recorridos guiados por el artista, así como conferencias temáticas y talleres creativos. En exhibición hasta el 26 de marzo de 2017. Opúsculo de la exhibición
Geometría difusa y figura alterada
Geometría difusa y figura alterada Edrix Cruzado, puertorriqueña radicada en Zaragoza, España y Sergio Abraín, oriundo de Zaragoza exponen en la Sala 2 del Museo su obra reciente. El reconocido crítico de arte Dr. Manuel Pérez-Lizano Forns describe sobre los artistas: “La muy dilatada trayectoria del pintor Sergio Abraín abarca diferentes periodos con intachable personalidad. En la presente exposición cabe sugerir la banda reguladora del espacio, tantas veces señalada en otros prólogos, que se distingue por los colores plata, gris y negro. A partir de aquí, sin duda, el espacio pictórico se inunda de cambiantes planos, sujerentes figuras que abordan problemas humanos y una sabia incorporación de cambiantes colores”. “La obra de Edrix Cruzado también se distingue por varias etapas dentro de la abstracción expresionista y con posterioridad mediante un minimalismo con incorporación de elementos industriales, tipo tubos de acero inoxidable, y troncos de madera. Pero algo ocurre que rompe dicha etapa. En el año 2016 el cambio es radical. Mantiene dicho impactante color, pero los fondos se cubren de variadas formas que sirven para acoger figuras masculinas y femeninas, de indiscutible atractivo y una por cuadro, que plantea muy diversas realidades, como la soledad, el suicidio o ese caminar hacia destinos impredecibles”.Dos pintores, en definitiva, unidos para mostrar la complejidad de su obra de manera que se complementan con fascinante verosimilitud.
María Emilia Somoza: Su huella en el aguafuerte
María Emilia Somoza: Su huella en el aguafuerte Mensaje de la artista: “Comparto con ustedes el producto de lo que ha sido el norte creativo de mi vida: el grabado en intaglio, específicamente el aguafuerte. Tratándose de una retrospectiva, son obras que representan distintas etapas de mi vida, anteriores y posteriores a mi desempeño en la dirección del Museo de Arte Contemporáneo de Puerto Rico. La tarea abarcadora y compleja que tuve que enfrentar durante ese periodo me obligó a detener en parte la producción artística, aunque no la reflexión estética ni la búsqueda mental de soluciones técnicas relativas a la práctica del grabado. Durante ese tiempo, además, fueron muchas las obras gráficas que se fueron forjando en mi mente. Como eje creativo central de mi producción, el concepto “vida” me estimuló a reflexionar sobre su reflejo en todas las expresiones de la naturaleza —mar, tierra, aire, agua, movimiento—, traduciéndolo en formas y colores con valores simbólicos. Lo onírico desempeña en ello un papel preponderante; igualmente los momentos que han dejado huella en mi vida. Mi obra está ligada a la técnica del aguafuerte, el más generoso medio de expresión artística que he encontrado en el camino. Aunque implica muchos retos y requiere una gran dedicación, una vez me abro a sus posibilidades, que son inmensurables, siento que el proceso creativo cobra alas y me obliga a la producción en un diálogo maravilloso con la técnica. Ofrezco mi obra a quienes se acerquen a ella como un mensaje en el que prima para mí la fuerza espiritual que le da sentido a la vida, un mensaje abierto que se enriquezca en significado con el aporte de todos”. – María E. Somoza El uso del barniz blando, la acuatinta y otras técnicas para contrastar áreas de superficies difuminadas con la dureza linear que se consigue con el buril o la punta seca crea una superficie que al momento de la impresión sugiere una infinita riqueza de tonos. Las referencias arquitectónicas y las diminutas raíces, los filamentos, las retículas y las esporas vegetales con las que Somoza ira creando una delicada red de valores gráficos [como dice Fernando Cros] son temas de la naturaleza que se usan por su valor simbólico y riqueza grafica […] su estilización los aparta de lo mimético y los integra a la preeminente abstracción que es el lenguaje sobresaliente de la obra de la artista. María Emilia Somoza ha marcado su huella en el aguafuerte de forma indeleble y elocuente. Su lugar en la historia de la gráfica puertorriqueña del medio siglo pasado queda firmemente reconocido en esta muestra, que abarca toda una vida de compromiso intelectual y entrega al duro oficio del grabado […sus] búsquedas […] se materializan, por la metamorfosis de alquimia y magia del aguafuerte, en la poesía visual de la imagen, sea esta heroica, lírica o elegíaca.
Maquiamelo
Maquiamelo Divas y Testas “Desde Bogotá, Colombia llega a nosotros una exposición titulada “Divas y Testas”, del escultor Maquiamelo (n. 1971). Es una colección de piezas ostentadoras de un perfil óptico y filosófico coherente. En conjunto poseen contenidos antropológicos donde hurgan en una fenomenología sostenida en el transcurso de la presencia humana sobre la tierra. Hace concurrir en ellas auras novedosas en que advertimos un discurso trascendente. Una vez alcanzamos asimilar total o parcialmente su presentación, lograremos concebir como tras las apariencias existe un entramado denso e inagotable.” José Pérez Ruiz, Ph.DCrítico de arte Asociación Internacional de Críticos de Arte (AICA) El reconocido escritor colombiano crítico de arte Álvaro Medina habla sobre esta gran exposición: «Esta exposición gira principalmente en torno a la belleza femenina, una fuerza de poderes infinitos que actúa en el plano carnal y sicológico, generando pasiones amorosas. Las mujeres bellas conocenen la juventud el esplendor y luego la inevitable decadencia. El intento de conservar ese esplendor es un anhelo humano que el escultor Maquiamelo ha resuelto haciendo retratos que nos remiten a la tradición de reducir cabezas,practicada por los indios Jívaros de Ecuador. Las cabezas reducidas se llaman tzantzas en el idioma aborigen y son trofeos rituales que, como un signo de poder individual, los indios portaban como parte de su atuendo en ocasiones especiales. Según los antropólogos que han estudiado el tema, las bocas de las tzantzas se cosían para retener y guardar el espíritu del difunto. Maquiamelo es un retratista que se ha dedicado, en sus representaciones, a encapsular el talento de algunas de las más bellas divas de Hollywood. Gracias a su imaginación creativa, la vigencia artística de esas actrices se potencia y convierte en un fetiche inolvidable. Porque una vez usted acaricia con los ojos uno sólo de estos retratos, jamás podrá olvidar su grata aunque perturbadora fascinación. «
Emilse Vega – SPF15
Emilse Vega – SPF15 SPF o “Sun Protection Factor” se refiere al tiempo que puedes estar expuesto al sol sin sufrir daños. Por ejemplo, un SPF de 15 te permite estar al sol al menos unas 15 veces más que lo que estuvieras sin filtro solar. Pero en la realidad, no es tan así. Muchos factores afectan cuán protegido estás. “Típicamente observo más de lo debido, unas 15 veces más, a esos sujetos potenciales que me gustaría pintar, así sea que los tenga de frente o en fotografía. Evalúo si quiero pintarlos, ponerles un filtro y mantenerlos vivos, protegidos en el canvas.” Cierta calma prevalece en las pinturas de Emilse Vega. Aún cuado el desarrollo del tema varíe, mantiene un interés en representar un mundo banal, o insustancial, para voltear al revés nuestro entendimiento del mismo. Llendo más allá de un estilo categórico, sus representaciones implican una cierta caracterización de estereotipos o de “stand in”, presentando una realidad que sugiere algo escondido, algo falso. Vega camina las calles y la playa donde reside, en constante observación, capturando imágenes en su cámara de lo menos espectacular de la vida cotidiana con el propósito de convertir estas imágenes en sus retratos al canvas. En una sociedad fascinada por, y sospechosa de conceptos de “veracidad” — esa seguridad de que algo es cierto aún cuando no haya evidencia –no nos sorprende que la veracidad de sus representaciones sea socavada de forma indirecta. Acentuando nuestra inquietud, Vega manipula sus sujetos para expresar su propia línea de extraño realismo. Los retratos como: Summer Babe, King of the Beach, Sunkissed, Hot in Herre, Blister in the Sun, Trap Queen, Lucky 13 y la abstracción bajo agua en Paradise II fueron sacados de la realidad. Las desviaciones que hace Vega de esta realidad percibida se tornan en un personaje de sus fotos para simplemente crear: o una revelación de la perfección del torso de una mujer, o un cabello suspendido en precisión en el aire, capturando de tal manera temas inofensivos, inocuos, dejando al descubierto tonos exquisitos. Las piezas trabajadas en esta exhibición realzan un desasosiego en la mujer, mientras simultáneamente seduce e intriga al espectador. Composiciones sencillas, colores vívidos, superficies planas, en un escenario que crea curiosidad, cargado de sexualidad, o simplemente bellas, te llevan dentro de su no tan imaginario mundo. Una vez allí, lo sencillo de sus colores, la atractiva densidad de sus composiciones así como la provocadora narrativa, nos fuerza a acortar la distancia perturbados por lo mismo que nos intrigó en un principio. Esto es lo que siempre mantendrá estas obras dinámicas, excitantes. Algunas pueden ofrecer un acercamiento a un espacio ilusorio. Sus composiciones pueden parecer llanas pero tenaces, como en la perspectiva en Those Hazy Lazy Crazy Days of Summer. No se adentran en un efecto imaginario pero lucen como en pausa. Muchas de estas escenas en sus obras si no parten de fotos que ella misma toma, son inspiraciones encontradas en las redes sociales. Aquí se presentan escenarios en donde se aspira a un estilo de vida al máximo, y son los medios sociales una caravana sin fin de la más impecable representación de sí mismo. La distancia que Vega crea entre el mundo real y la verdad alterada nos deja inquietos. Podemos reconocernos a nosotros mismos, nuestros deseos, aspiraciones, en estas pinturas, despertando nuestra zona de comodidad en algo revelador que dentro de la calma inicial, termina en algo inquietante. El proceso de Vega siempre comienza con las técnicas académicas en la pintura que ya no se encuentran entre las favoritas. Junto con su marcado uso de este estilo antiguo, prevalece su interés en la labor con una destreza meticulosa de aplicar cientos de pinceladas individuales. Su método desafía las tendencias contemporáneas que son caracterizadas por procesos conceptuales considerados bien “cool”, abstracciones incoherentes, y figuración expresionista. Las primeras pinturas figurativas de Vega se les debe a las de John Singer Sargent (n. 1856) quien es considerado el artista líder en la pintura del retrato de su generación, por sus recreaciones del lujo de la era Edwardiana. En contraste, la fijación de Vega en la belleza, se manifiesta no en aquellas exageraciones pero en el fastidioso proceso invertido en la pintura. Sus abstracciones de agua, perezosos sujetos, cuerpos perfectamente esculpidos, tomando sol, son tan sencillos que su intenso enfoque en ellos podría parecer desconcertante pero a su vez un intento de humor negro. Esto acentúa la naturaleza peculiar de las obras, que de otra forma serían simples sujetos cotidianos, cada uno creando una percepción de la realidad posando firmes en el espacio entre medio. Vega aspira a mantenerse siendo una artista clásica dentro de la tradición figurativa, exponiendo aspectos modernos de su mundo.
CORPUS ET ANIMA
CORPUS ET ANIMA Rafael Edgardo Del Olmo, conocido por el seudónimo Redo Del Olmo es ceramista, escultor y pintor con 35 años de carrera en el campo de las artes plásticas. Su talento lo ha llevado a alcanzar reconocimiento nacional e internacional. Tiene a su haber múltiples exposiciones individuales y ha participado en más de sesenta exposiciones colectivas, a través del mundo. Entre estos países se destacan: Monterey, México; Caracas, Venezuela; Zagreb, Croacia; Faenza, Italia; Filadelfia, Pensilvania; y Baltimore, por mencionar algunos. Su obra forma parte de colecciones permanentes locales e internacionales, tales como: el Museo de Arte de Ponce; Studio Clay, en Filadelfia; y la Kern Foundation, además de coleccionistas del arte local e internacional. Entre sus premios y reconocimientos se destacan: Primer Premio en la 5ta. Bienal Premio Casa Candina 1996; el Premio Zebenik en la 5ta. Trienal Mundial de la Cerámica en Pequeño Formato, en Croacia; seleccionado a participar en la Colectiva del Museo Internacional de la Cerámica Contemporánea en Faenza, Italia; y la nominación de Mejor Exposición Individual en Galería Comercial, Premios AICA (Asociación Internacional de Críticos de Arte) 2002 San Juan, PR. Posee un bachillerato en Artes Plásticas General de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Rio Piedras. Actualmente, se desempeña como profesor de cerámica artística en el Taller de Bellos Oficios de la Universidad de Puerto Rico y en el bachillerato de Diseño de la InterMetro.
Biomórfico
Biomórfico El Museo de las Américas presenta la exposición titulada: Biomórfico del artista puertorriqueño Héctor Rafael Rodríguez. La muestra cuenta con 23 pinturas al óleo que fueron producidas por el artista entre el 2010 y el 2015. En ellas se explora la coexistencia inclusiva y armoniosa a través de imágenes donde se unen referencias anatómicas y botánicas. La fusión de géneros provoca la comunión de los desnudos con disímiles abstracciones hasta crear profundas escenas sicológicas en donde la calidad andrógina de las formas rompe con los esquemas tradicionales de masculinidad y feminidad. Individuo y naturaleza mantienen una continuidad unificadora de una imagen colmada por una belleza orgánica, triunfante y difundida a través de diversos soportes pictóricos. Héctor Rafael cuenta con un Bachillerato en Artes Plásticas con concentración en Pintura del Colegio de Artes Visuales de Syracuse University y una Maestría en Educación de Bellas Artes del Programa Graduado de Educación de la Universidad del Turabo. La obra de Héctor Rafael ha sido expuesta en Puerto Rico, Nueva York, Boston, Chicago, Doral (Florida), Milledgeville (Georgia), Estambul (Turquía) y Florencia (Italia). Su trabajo artístico forma parte de la colección permanente del Museo de Arte Francisco Oller y Museo de Arte de Caguas junto a otras colecciones de gran prestigio. Héctor RafaelPintor, dibujante y educador. Nació en Santiago Compostela (España) de padres puertorriqueños en 1973. Su familia regresa con él a Puerto Rico cuando tenía tres años de edad y es allí donde crece y aprende a apreciar la riqueza de su herencia cultural. En el 1995 el artista completó un Bachillerato en Artes Plásticas con concentración en Pintura del Colegio de Artes Visuales de Syracuse University. Héctor Rafael trabajó como catalogador y manejador de arte (de 1996 a 2002) para varios departamentos de la casa de subasta Christie’s en la ciudad de Nueva York (Departamento de Arte Latinoamericano, Departamento de Pintura Europea del S. XIX, Departamento de Arte y Objetos Marítimos). Durante ese período tuvo la oportunidad de estar en contacto directo y estudiar con detenimiento la obra de algunos de los artistas de mayor relevancia en la historia del arte. En el 2002 el artista regresó a Puerto Rico, completó una Maestría en Educación de Bellas Artes del Programa Graduado de Educación de la Universidad del Turabo y ha estado exponiendo constantemente en museos y galerías. La obra de Héctor Rafael ha sido expuesta en Puerto Rico, Nueva York, Boston, Chicago, Doral (Florida), Milledgeville (Georgia), Estambul (Turquía) y Florencia (Italia). Su trabajo artístico forma parte de la colección permanente del Museo de Arte Francisco Oller y Museo de Arte de Caguas junto a otras colecciones de gran prestigio. Biomórfico (por Héctor Rafael)Biomórfico es la exposición pictórica de seres transfigurados que superan la fragmentación. En ella, presento escenas en donde las disecciones anatómicas se fusionan hasta lograr la reconstrucción del individuo a través de las representaciones de cuerpos que trascienden tiempo y espacio al crear un vínculo entre el universo interno y externo del ser humano. La representación de estos desnudos seccionados y reconstruidos sugiere también sexualidades que han sido interrumpidas, manipuladas y luego magnificadas para la contemplación pública. La fusión de géneros provoca la comunión de los desnudos con disímiles abstracciones hasta crear profundas escenas sicológicas en donde la calidad andrógina de las formas rompe con los esquemas tradicionales de masculinidad y feminidad. En mis lienzos, las figuras se liberan para que el ser humano y su propósito se conviertan en uno, desnudo e indiviso. La coexistencia entre la flora y las referencias anatómicas se patentiza en algunas de las imágenes que componen la muestra. Estas comparten el protagonismo con paisajes anímicos escindidos solo por los espacios negativos que separan cada lienzo, como si con ello se revelara el agravio al que han sido sometidos el ambiente y la individualidad de sus habitantes. Individuo y naturaleza mantienen una continuidad unificadora de una imagen colmada por una belleza orgánica, triunfante y difundida a través de diversos soportes pictóricos. Por último, la presencia de un círculo flotante en muchas de mis pinturas puede actuar ya como eje central de la obra o como un elemento que proporciona balance a la pieza. Este habitualmente acompaña las formas carnales que transmutan en su presencia. En las obras donde el círculo abandona el lienzo, el espacio se fragmenta pero la imagen se extiende incesante por el espacio. El círculo es el único elemento de mi obra donde no existe volumen, luz o sombra para establecer un contraste con las formas anatómicas que lo acompañan; de esta manera contrasto el mundo material y aquello que no es parte de este pero es omnipresente. El círculo también enfatiza el dialogismo constante que existe en mi obra pictórica entre lo terrenal y lo etéreo, lo carnal y lo espiritual, entre el artista y su inspiración.Mi propuesta artística invita a experimentar la coexistencia inclusiva, armoniosa y esperanzadora. Mis lienzos, formas luminosas nacidas para el deleite y la introspección, reverberan la energía incontenible e inmutable que renace, unifica y transforma.
Resonancias
Resonancias Dentro de la exploración creativa los temas recurrentes de Pablo Montes se encuentra el del tiempo; el cual inicio en el año 1995 con la exposición «Coordenadas del Tiempo”. En esa serie de obras trabajó de una manera sugestiva, creando imágenes que se mezclaban y transformaban con su espacio a través de texturas orgánicas utilizando varios medios como los dibujos a tinta, la serigrafía y las pinturas al óleo. Más adelante, en el año 1997, en la exposición «Viveza y Pereza del Tiempo» exploró el tiempo y los estados de ánimo, predominando el uso de la figura humana femenina. El espacio y la luz en estrecha correlación que parece depender uno del otro fue la motivación para sus temas en el 1992 en su exposición: «Imágenes Integradas». Más adelante en «Etapas», ambas con una serie de dibujos a tinta donde el espacio y la luz sirven de vehículo para alterar la figura que simboliza la materia. Con este trasfondo el artista se percata de que debería auscultar el tema de la energía. para completar lo que se conoce como las cinco esencias que componen la realidad: espacio, tiempo, energía, materia y luz. De esta manera Pablo Montes enlaza y conecta a las mismas en diferentes indagaciones visuales. Esta nueva exposición, en el Museo de Las Américas será una que muestre la resonancia visual de estas formas básicas utilizando temas que reflejan la diversidad de energía que emana del ser humano de acuerdo a sus vivencias. Pablo Montes O’Neill Estudió en la Escuela de Artes Visuales Lucchetti en San Juan, Puerto Rico. Se graduó con el alto honor en pintura y también recibió la medalla 1982 de alto honor en Bellas Artes otorgada por el distrito de San Juan. Se matricula en el programa de Bellas Artes de la Universidad de Puerto Rico donde fue estudiante de Rafael Rivera García y Luis Hernández Cruz. Más adelante tuvo la oportunidad de transferirse a Pratt Institute en Nueva York, donde obtuvo un bachillerato en Bellas Artes. Durante 1986, comienza a trabajar en varias agencias de publicidad como Ilustrador y diseñador gráfico. Pablo también se desempeñó como ilustrador editorial por varios años para el periódico El Nuevo Día. En 1989, se trasladó a Chicago, donde participó en varias exposiciones celebradas en la Ciudad de los Vientos incluyendo el «Hispanic Festival at the Museum of Science and Industry». Durante ese tiempo, también trabajó en varias agencias de publicidad y publicó sus ilustraciones en revistas y periódicos como Vegetarian Times y Chicago Reader, así como en los libros de «La serie Discovery», entre otros. En 1990, su dibujo a tinta, titulado ‘Dancing with Shadows’ fue publicado en la portada de la revista de Chicago Artist News en la edición de octubre. En 1992, regresó a Puerto Rico y organizó varias exposiciones en diversas galerías en San Juan. En 1994, comenzó su taller de diseño gráfico e ilustración de editoriales y libros mientras también trabaja en diversas exposiciones. En 1996 gana el primer lugar en la competencia del Ateneo de Puerto Rico con la obra Manto de Soledad en la categoría Grabado. En 2013, fue seleccionado por un jurado para ser el artista del mes en Artsyshark.com. En 2014 fue seleccionado para formar parte de la exposición “See the Light” en el Museo de Artes de Attleboro en Massachusetts. Pablo ha tenido más de 10 exposiciones individuales y 15 exposiciones colectivas en Puerto Rico y Estados Unidos. ResonanciasDentro de la exploración creativa los temas recurrentes de Pablo Montes se encuentra el del tiempo; el cual inicio en el año 1995 con la exposición «Coordenadas del Tiempo”. En esa serie de obras trabajó de una manera sugestiva, creando imágenes que se mezclaban y transformaban con su espacio a través de texturas orgánicas utilizando varios medios como los dibujos a tinta, la serigrafía y las pinturas al óleo. Más adelante, en el año 1997, en la exposición «Viveza y Pereza del Tiempo» exploró el tiempo y los estados de ánimo, predominando el uso de la figura humana femenina. El espacio y la luz en estrecha correlación que parece depender uno del otro fue la motivación para sus temas en el 1992 en su exposición: «Imágenes Integradas». Más adelante en «Etapas», ambas con una serie de dibujos a tinta donde el espacio y la luz sirven de vehículo para alterar la figura que simboliza la materia. Con este trasfondo el artista se percata de que debería auscultar el tema de la energía. para completar lo que se conoce como las cinco esencias que componen la realidad: espacio, tiempo, energía, materia y luz. De esta manera Pablo Montes enlaza y conecta a las mismas en diferentes indagaciones visuales.